Cuando llega el 31 de octubre en Carolina del Norte, los niños están entusiasmados con Halloween, entre disfrazarse y salir a pedir caramelos. Sin embargo, esta época del año puede ser extremadamente peligrosa para los niños, ya que aumentan los accidentes y las muertes de peatones. Los padres deben educar a sus pequeños sobre las precauciones de seguridad, y los automovilistas deben ser más conscientes y estar más atentos mientras circulan por la carretera.
Según el Consejo Nacional de Seguridad, en Halloween los niños mueren atropellados más del doble que en otros días del año. Los padres y los niños pueden hacer varias cosas para evitar que esto ocurra. Una de ellas es asegurarse de que los disfraces no impidan a los niños ver a su alrededor. Las máscaras y las capuchas son especialmente peligrosas, pero elementos como las alas de gran tamaño también pueden obstaculizar la visión. Si los niños van a salir al anochecer o en la oscuridad, asegúrese de que su disfraz tiene algún elemento reflectante o de que llevan algún tipo de luz para que los demás puedan verlos. También deben caminar sólo por zonas con iluminación adecuada y únicamente por las aceras.
La AAA Exchange también ofrece consejos a los conductores. Entre ellos: